Por qué necesitamos una revolución silenciosa

20/07/2020

Los eventos de los últimos meses han puesto la salud y el bienestar en el centro de todo lo que hacemos y han cambiado nuestras vidas por completo. Hemos pasado de ciudades ruidosas y bulliciosas a ciudades desiertas y oficinas en el hogar ruidosas. En casa, nos hemos dado cuenta rápidamente de lo difícil que es hacer cualquier tipo de trabajo cuando hay mucho ruido que nos distrae. Hemos tenido que recordar una lección que a menudo olvidamos: El silencio es invalorable. Además, lo que es más importante, el silencio es salud.

Petardos, conciertos de rock, cortadoras de césped, sirenas: todos estos ruidos se suman y pueden tener un impacto negativo sobre nuestra salud, mucho más allá de nuestra audición. La Organización Mundial de la Salud (OMS) indica que el ruido excesivo daña gravemente la salud, lo que incluye:

• Alteración del sueño
• Aumento del estrés
• Disminución del desempeño en la escuela o el trabajo
• Presión arterial elevada
• Enfermedades cardíacas

Una tormenta perfecta de malestar acústico

Durante las disposiciones de quedarse en casa que muchos de nosotros hemos experimentado, hemos llegado a valorar una nueva era de silencio inesperado fuera de nuestras casas, y hemos aprendido sobre la importancia de una buena acústica en casa.

En condiciones normales, la mayoría de nosotros no estamos en casa durante el día. Ahora que tenemos que hacer llamadas en conferencia y preparar presentaciones, somos conscientes de nuestros vecinos y el ruido, y de las demás personas de nuestro grupo familiar que trabajan, se divierten y asisten a la escuela de manera virtual. Más tiempo en casa también ha acentuado nuestra conciencia del ruido del edificio, como lavadoras, unidades de aire acondicionado y electrodomésticos. Esto se ha convertido en una tormenta perfecta en términos de malestar acústico.

Por otro lado, se ha producido el impacto de un entorno urbano tranquilo, con calles cada vez más silenciosas. Antes de la pandemia, los niveles de ruido en la ciudad de Nueva York promediaban entre 70 y 85 decibeles, mientras que en Los Ángeles, los restaurantes promediaban entre 80 y 90 decibeles, tres veces más que los 30 decibeles que pueden alterar el sueño o el aprendizaje. La reducción radical del ruido ambiental por obras de construcción, tráfico pesado, vuelos, restaurantes y bares ha sido tan sorprendente que algunos especialistas en acústica han informado que el canto de las aves puede escucharse mejor que nunca. Los beneficios ambientales de la cuarentena en cuanto a la reducción de la contaminación del aire y del agua se han documentado ampliamente. No podemos olvidarnos de los beneficios de una reducción en la contaminación sonora.

Cómo Knauf Insulation puede ayudar a mejorar la salud acústica

Antes de la pandemia, la contaminación sonora afectaba todos los aspectos de nuestras vidas. En las escuelas, las aulas ruidosas deterioraban la capacidad de aprender; en las oficinas, era imposible concentrarse si había una trituradora ruidosa junto a una estación de trabajo; en los hoteles, la contaminación sonora afectaba las experiencias de los huéspedes; y nadie disfrutaba de un restaurante que fuera demasiado ruidoso para tener una conversación.

Dado que pasamos más tiempo en interiores cuando trabajamos y asistimos a la escuela, apliquemos las lecciones que hemos aprendido durante la pandemia y reconozcamos plenamente el hecho de que el silencio es bueno para nuestra salud y bienestar. Para crear espacios más tranquilos, muchos profesionales de la construcción eligen el aislamiento de fibra de vidrio para disminuir eficazmente la transferencia de sonido en edificios residenciales, comerciales e industriales. Agregar aislamiento para el control del sonido en las paredes entre las habitaciones y en los espacios aéreos entre los pisos, agregar envolturas para conductos alrededor de los conductos metálicos de los sistemas de climatización y envoltura para tuberías alrededor de las tuberías expuestas puede ayudar a reducir la transferencia de ruido no deseada. Si sus ventanas o puertas están flojas y vibran, la vibración puede aumentar las ondas sonoras. El sellado hermético de estas áreas puede ayudar a reducir la cantidad de vibración.

Es más importante que nunca que el bienestar acústico se tenga en cuenta en cada aspecto de nuestros entornos construidos, ya que mejora la salud, nos ayuda a ser más productivos y, en última instancia, nos hace sentir mejor.